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QUÉ ES Y ALGUNOS EJERCICIOS PARA SACAR MEJOR PROVECHO DE ELLA

La memoria ayuda a la adquisición del lenguaje que utilizamos y abre las puertas a la adquisición de más formas de comunicarnos, permite aprender distintas disciplinas y evoca experiencias en cuestión de milésimas de segundos. Dando un vistazo a lo que en algún momento fue denominado por Anderson y Bower (1973, pág. 1), “el supremo enigma intelectual del siglo”. La memoria, puede definirse como la capacidad de retener información, reproducirla y reconocer las cosas familiares cuando posteriormente se las ven o escuchan nuevamente. El estudio de la memoria consiste en el intento de describir cómo se ejercitan estas capacidades y por qué (en el caso del olvido) los esfuerzos por desarrollarlas pueden verse frustrados.

Por un lado, la memoria puede vincularse con el proceso creativo, al permitirle a la persona analizar el mundo que le rodea, basándose en una lógica sustentada en experiencias previas. Por ejemplo, la calificación que un estudiante tiene en un examen pueden ser resultado de lo que éste recuerda, como de lo que puede deducir de forma lógica a partir de lo que conoce; esto representa un ejemplo de lo que la memoria exitosamente puede lograr, sin embargo, ¿Qué hay de los casos en los que, el mismo estudiante no logra recordar ni deducir las respuestas, aún luego de haberlas repasado por tiempo antes de la evaluación?

La Psicología se las ha ingeniado a través de los años para descifrar y cuantificar el funcionamiento de la memoria como representación mental, de modo que se puedan desarrollar estrategias para mejorarla y sacar el mayor provecho de la misma. Éste artículo puede dotarle con algunas de las mejores estrategias para sacar el potencial que tiene la memoria para su uso cotidiano y resolución de problemas a partir de deducciones lógicas, basándose en cómo la memoria funciona.

Ahora, es importante tener en cuenta el proceso de la memoria funciona gracias a tres fases:

  1. Adquisición.

  2. Retención.

  3. Recuperación.

A continuación, algunas prácticas que pueden ayudar a reconocer y reforzar cada una de las fases, de modo que se pueda adquirir, retener y recuperar la información de forma más eficaz: Proceso de adquisición. Para que algo pueda ser recordado, primero tiene que haber sido “puesto” en nuestra memoria y esto involucra dos procesos muy importantes, la atención que ponemos a aquello que queremos recordar y la comprensión de aquello que"queremos recordar", intentamos transmitir. Proceso de retención. Este paso podría significar el éxito o fracaso del que podamos recordar algo con exactitud, ya que es la capacidad de mantener en nuestra memoria aquello que hemos adquirido, y aquí está en juego el rol de la perspectiva con la que codificamos/decodificamos la información que recibimos. Por ejemplo, algunas personas tienden a recordar cómo se sintieron ante cierto evento, más no los detalles del mismo, algunas personas no recuerdan cómo fue exactamente que un suceso ocurrió pero recuerdan que fue negativo/positivo para ellos, por lo que el cerebro tiende a completar la versión de la historia faltante, agregando partes que no fueron exactamente las recordadas, pero que se apegan a lo que se experimentó en función de las emociones que las personas asocian a la experiencia recordada. Proceso de recuperación. Aun luego de que hemos codificado correctamente la información y haberse retenido intacta, puede ocurrir que no logremos traer al presente el momento deseado, de allí el fenómeno de tener algo que queremos recordar “en la punta de la lengua”, sin poder sacarlo a la luz por completo. La recuperación de la información almacenada en la memoria es un proceso estratégico, ya que motiva a nuestro cerebro a valerse de las pistas que tiene, más el orden lógico de lo que se intenta recordar, de modo que podamos seleccionar de los archivos de memoria exactamente lo que intentamos encontrar. ¿CÓMO PUEDO RECORDAR MEJOR?










* Prestar atención:

Si se encuentra frente a información que reconoce como algo que le será de ayuda recordar en el futuro, enfoque su atención a ello, aunque parezca absurdo o difícil de lograr al principio estando acostumbrados a un ambiente cargado de estímulos, conforme se vaya haciendo consciente del presente y de la orden a sus sentidos de enfocarse en lo que será relevante conocer, lo irá logrando. Tenga en cuenta que así está optimizando el proceso de adquisición de información


* Enfocarse en comprender: Tenga en cuenta que, si intenta recordar algo que, desde el principio no está claro en su memoria, será difícil traerlo al presente con exactitud y comenzará a verse en la necesidad de completar las partes faltantes del recuerdo con información que podría no ser exacta. Por lo tanto, la recomendación es, si no comprende algo que necesita memorizar, pregunte, investigue y apoye ese conocimiento con tanta información sea posible. * Ordenar la información: Así como es más fácil encontrar lo que se busca en un espacio ordenado, nuestro cerebro es capaz de deducir de forma lógica una información que se encuentra ordenada en nuestros archivos mentales, esto se logra con la capacidad de deducir los sucesos siguiendo esquemas, partiendo desde un punto “X”, intente formar en su memoria la información como gradas o pasos siguiendo un orden, de modo que nada se se escape al momento que deba recurrir a un cúmulo grande de información. * Asociar: Es usual que tendamos a memorizar algunas cosas más fácilmente que otras de acuerdo a nuestros intereses y experiencias previas; apoyándose en aquellos recuerdos firmes, puede utilizar códigos para llegar al recuerdo que necesita, por ejemplo, si se intenta recordar el nombre de una persona, puede comenzar asociando algo de ésta persona (una seña particular en el rostro, el color o forma  de sus anteojos, etc.) que pueda encontrar familiar a algo que ya conoce (un amigo cercano, familiar, un objeto o recuerdo de infancia), luego que ha formado ésta asociación, se sella con el nombre que quiere recordar. * Apoyarse en recuerdos sensoriales: Si el utilizar una rima, canción, imagen o algo que le haya hecho reír puede reforzar lo que intenta recordar acompañándole, puede apoyarse en recuerdos de todos los sentidos para ayudarse en éste proceso. * Conocer su memoria: Recuerde que la memoria es más que una función de nuestro cerebro, también va acompañando nuestras experiencias y personalidad, por lo que algunas técnicas pueden funcionar mejor en usted que en otras personas y es importante que, conforme se familiarice con su forma de memorizar, desarrolle y saque provecho de las técnicas que mejor funcionen para usted. Si desea conocer más acerca de éste y otros procesos mentales, así como desarrollar más técnicas que funcionen para usted, en  Clínica Psicológica SIP será un placer ayudarle a lograrlo.

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