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En esta ocasión tocaremos un tema muy importante, ya que es necesario conocer la influencia que tienen las compras que realizamos como “Regalos” para nuestros hijos, y la frecuencia con las que las llevamos a cabo.


En primera instancia, al ser padres primerizos, solemos enfocarnos en querer agradar a los niños y darles todo lo que podamos, siempre y cuando nuestras capacidades nos lo permitan.


Empezamos a invadir el territorio de los niños con juguetes, juguetes y más juguetes.

  1. De 1 a 3 años, los niños responderán con una gran sonrisa, al recibir este juguete, o recompensas.

  2. A partir de los 4 años el niño cada vez demanda más atención y no solo necesita recibir cosas materiales, sino que también cariño, dedicación, comprensión.

Es ahí donde algunos padres nos cuestionamos:


¿Por qué mi hijo es tan rebelde si le compro lo que me pide, o le llevo a casa siempre cosas nuevas?,


Esto se debe a que los niños buscan desesperadamente llamar la atención de sus padres, en la mayoría de los casos, poniendo mayor valor a lo emocional que a lo material.


Causas positivas al hacer regalos constantes a nuestros hijos.



* Un niño feliz

* Estado de ánimo positivo, es decir si se encontraba molesto, o triste, los niños se pondrán felices automáticamente.

* Se convertirá en una persona agradecida, por que recordara que sus padres le daban todo, pero a la vez debe ser medido para que los niños sepan valorar el obsequio.

* Si se le explica con anticipación a causa de que recibirá un regalo, al momento de recibirlo observará todo de diferente manera, ya sea agradecido, responsable o amigable.


OJO: Todo esto es positivo siempre y cuando los regalos no solo sean para quedar bien como padres, para ser un súper padre, madre héroe, ni tampoco para que el niño deje de realizar alguna pataleta si este es el caso.


Será importante; ser un padre comunicativo, explicándole que se le ama, y según su comportamiento recibirá premios, si las pataletas continúan, no habrá premio, al igual si los deberes escolares no están realizándose, de esta forma se le presenta a los niños un modelo de padres seguros de sí mismos y este es el ejemplo que los niños llevaran toda su vida.


Consecuencias negativas al hacer regalos constantes a nuestros hijos.


* Se está criando un niño dependiente de lo material, que a lo largo del tiempo lo vera necesario y estará cómodo siempre de esa forma.

* Será difícil administrar su dinero en el futuro, ya que por medio de la observación lo tendrá como la solución para todo, las compras será siempre su fuerte.

* El problema es que en la adultez las deudas las tendrá que afrontar solo, caso contrario a los padres les tocará velar por el niño siempre, hasta que logre ser independiente.

* Poco valor a las cosas y a las personas.

* Si no se le da el obsequio buscarán formas de conseguir dinero a escondidas.

* Retraimiento, poco comunicativo en la adolescencia, ya que a veces no hay mucha comunicación en casa, sino que solo lo material ha estado presente.


OJO: No siempre es que vaya a funcionar así, pero recordemos que si podemos evitar situaciones futuras es mucho mejor, a veces será importante sentarnos a jugar con un juego viejo que el niño disfruta, y compartir en equipo, que traer uno nuevo, que el niño no estaba pidiendo, sino que lo que necesitan es mayor apoyo emocional, abrazos, palabras dulces y gestos que demuestran confianza para los niños.


Por lo tanto, podemos evitar que crezca una persona soñando con el momento de las compras deforma compulsiva, todo tiene límites y es desde la infancia donde se van dándolos ejemplos para su desarrollo y madurez.


Es importante hablar con nuestros hijos, explicándoles que el dinero cuesta y este no es fácil de ganar, de tal forma que empiecen a utilizar el raciocinio y capacidad de valoración a lo material.


Agregando que cuando estos niños lleguen a la adultez, tendrán capacidad de afrontar situaciones difíciles donde los padres no siempre estarán presentes.


*Dele a su hijo la virtud de conocerle más allá de un juguete, a veces ese será su mejor regalo*


Clínica Psicológica SIP

¡Cambiando mentes, transformando vidas!

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